La mala situación económica de los medios y la pésima o nula remuneración de los fotógrafos, planea en la segunda jornada del seminario de Fotografía y Periodismo
Albarracín, en Teruel, amaneció sin nubes y sin el frío esperado en un mes de octubre. Como preludio a las nubes, la llovizna y a los claroscuros de la tarde, el seminario sobre fotografía y periodismo organizado por la Fundación Santa María de Albarracín, se tornó, a ratos, pesimista. La jornada arrancaba con una mesa redonda protagonizada por jóvenes fotógrafos bajo la moderación de Gervasio Sánchez. El tema, los problemas de la profesión. Pero pronto derivó en lo que a todos nos ocupa y preocupa: la crisis.
«Hemos retrocedido 30 años en la profesión», arrancaba Gervasio Sánchez. «En este último viaje a Afganistán he gastado más de lo que ingresado. El ritmo de colaboración con los medios ha bajado mucho para los que ya estábamos en la profesión, pero también o sobre todo para los que estáis empezando».
Las quejas sobre cómo los medios de comunicación estaban recortando las colaboraciones (de las que viven muchos fotógrafos profesionales), no dejaron de aflorar, pero también sobre cómo se estaban cambiando la concepción de la fotografía, la otra crisis que afecta al sector . «La figura del editor que iba purgando los trabajos que llegaban está desapareciendo», se lamentaba el fotógrafo del Heraldo de Aragón José Miguel Marco .»Ahora vale cualquier imagen, porque todo el mundo tiene cámaras de fotos en sus bolsillos. Justifican el uso de la imagen con cualquier argumento, pero lo importante es que es gratis».
Ante la falta de inversión de los medios en fotografía, Fosi Vegue, uno de los directores de la escuela BlankPaper, apuntaba hacia salidas distintas a los medios para ganarse la vida. «Lo que propone la escuela como salidas es la creación de un libro, preparar proyectos para becas o exposiciones», explicaba. «De todas maneras, estas charlas lloronas no me gustan mucho», añadía luego. «Creo que mejor es ser activista, currante, y si no te dan trabajo,[los medios] te tienes que poner tu a ello, juntándote con otros, o trabajando de lo que sea para poder vivir».
En esa misma línea intervenía la fotoperiodista y profesora de la Universidad Ramon Llull, Sandra Balsells , pero incidiendo en la falta de preparación de muchos fotógrafos a lo hora de presentar sus proyectos. «Tiene que haber un esfuerzo extra sobre todo de la gente joven, en saber preparar los proyectos, redactarlos bien, con presupuestos», explicaba añadiendo su experiencia como miembro de jurados en los que no llegaban en buenas proyectos, o lo buenos no están bien presentados «Hay que buscarse las castañas como sea», concluía.
Pero si los medios de comunicación viven en una grave crisis, muchas instituciones han recortado también en sus proyectos culturales. «El problema no es buscar alternativas, es buscar financiación, y las instituciones están cortando el grifo», insistía Gervasio Sánchez. «Se ha dejado de financiar proyectos, de dar de la noche a la mañana sin explicar nada , como ha pasado con becas tradicionales como fotopress que daba La Caixa».
«Yo siempre me he planteado el mundo de la fotografía como una profesión», terciaba el fotógrafo Joan Pujol .»Si tengo que hacer una foto de boda o de un plato, la hago, porque de todo se aprende. A lo mejor un mes sacas de una boda, y a lo mejor otro mes secas de otra. Y mientras vas a vender tu trabajo a los periódicos, que cuesta mucho hacerlo, porque ninguna publicación te encarga nada».
«La bancarrota en los medios de comunicación es un hecho. Solo este año se han quedado en la calle 3000 periodistas», intervenía el editor de fotografía de El Mundo Chema Conesa.»Hay que buscar alternativas fuera de los periódicos, porque la era industrial que conocíamos se ha acabado, y salir fuera del país». Luego, durante su charla sobre retrato como género, añadía: «Estamos en un momento donde sobran periodistas, hacen falta fotógrafos, pero no hay dinero para pagarlos. En prensa creen que con una cámara un redactor ya puede hacer fotos».
«Los periódicos tienen que reinventarse», proseguía Conesa. «Comunicamos con mayor inmediatez en Internet que en el papel. Yo estoy deseando que los periódicos en papel pasen a ser semanales y ofrecer artículos de mayor reflexión, porque las noticias ya las conocemos al instante».